Mi infancia se quedó en el aire , por aquel campo jugando al escondite entre los rosales.
Y sigue jugando allí , a la sombra de los árboles.
Mi infancia camina buscando momentos mejores , y se echa la siesta mirando las nubes.
Por la mañana canta y come piruletas , y por la noche se recoge pero deja su presencia.
No le importa los horarios , tampoco tiene prisa.
Mi infancia me espera arropada en la montaña de arena .
Y , a veces cuando de tanto ser adulta , se me cansa el alma....
me voy con ella y la cojo de la mano.
Y , a veces cuando de tanto ser adulta , se me cansa el alma....
me voy con ella y la cojo de la mano.
Muy bonita y tierna entrada.
ResponderEliminarEstá bien recuperar aquel espíritu que teníamos de niños.
¡Que tengas buen domingo!
José
Hola José ,feliz domingo para ti :)
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